La fisioterapia estética es una ayuda externa a la recuperación física donde el cuerpo ha sufrido un deterioro, el cual implica un daño estético.
El objetivo de la misma, es buscar a la causa del problema y tratarlo de la forma más adecuada.
De esta forma, las terapias físicas son un gran aliado para la salud corporal y para el nuevo concepto de belleza. El cual promueve la no intervención quirúrgica de carácter estético.
¿Cuáles son los tipos de tratamiento de fisioterapia estética?
Encontramos técnicas electrosonotérmicas (ultrasonidos, calor, crioterapia…), además de técnicas manuales como: masaje común, drenaje linfático o liberación tisular, entre otras.
Pero, ¿conocemos todos los beneficios que supone la fisioterapia estética? Se trata de muchos beneficios.
Entre ellos, destacan que se trata de tratamientos personalizados, donde el profesional tendrá en cuenta las peculiaridades de cada cliente.
Asimismo, sus efectos no son solo estéticos. Por ejemplo, el drenaje linfático también ayuda a eliminar la sensación incómoda de piernas cansadas. O incluso, tonificar algunos grupos musculares que pueden presentar síntomas de atrofia debido a falta de movimiento.
A su vez, no podemos olvidar que la fisioterapia estética, duplica los efectos de los productos usados en cada tratamiento.
Y por último, y más importante, se trata de la forma más adecuada de mejorar nuestro aspecto, de forma progresiva y natural sin sobreesfuerzo.