Cuando nos sometemos a una cirugía, nuestro objetivo es siempre estar mejor y más sano que antes de la intervención, buscando la correcta recuperación. Es por ello que debemos buscar las mejores opciones, y es un claro hecho que la fisioterapia postoperatoria juega un papel fundamental para la correcta recuperación.
La fisioterapia postoperatoria, junto con un proceso guiado y controlado por un fisioterapeuta, obviamente, no solo reduce el riesgo de posibles lesiones. Sino que, además, el paciente se sentirá atendido, y su recuperación será más temprana.
Es cierto que no todos los postoperatorios son iguales, pero en su mayoría debemos guardar reposo, lo que provoca el adormecimiento físico, tras esto, cuando queramos recuperar la rutina nos costará más.
Para ello, la fisioterapia hace que la vuelta a la “normalidad”, sea individualizada, con ejercicios específicos para la lesión y el ritmo de cada paciente. La fisioterapia postoperatoria también nos ayuda a calmar el dolor, ya que, tras la cirugía el paciente sentirá dolor, en mayor o menor grado. Por lo que, la rehabilitación mitiga el dolor, no solo ayuda a la recuperación física, sino también emocional. De hecho, estudios recientes han revelado las grandes ventajas de la fisioterapia, no solo tras la cirugía sino también antes de la misma.
Por ejemplo, los pacientes sometidos a una cirugía abdominal pueden sufrir complicaciones respiratorias. Esto se debe a que, la incisión en el abdomen debilita los músculos respiratorios, los cuales tienen más dificultades para realizar su función, siendo la respiración menos profunda, pudiendo llegar a un colapso de los pulmones.
¿Cómo nos puede ayudar la fisioterapia? A través de ejercicios de tos o enseñando al paciente a respirar adecuadamente, entre otras cosas.
¿Y qué hay de las cirugías estéticas? Sí, la fisioterapia también forma parte del proceso del postoperatorio, siendo la disciplina más recomendada. Se sabe que tras una liposucción, la fisioterapia es de vital importancia en el pre y postoperatorio. Durante el preoperatorio, es eficaz a la hora de preparar diversos tejidos de la piel. Mientras que, en el postoperatorio mejora la circulación local, previene, normaliza y minimiza las consecuencias de la cirugía. Ya que, previene, mantiene y recupera al paciente de posibles afecciones. Ya sean metabólicas, linfáticas, endocrinas, etc.
Si necesitas el asesoramiento de un profesional en fisioterapia, no dudes en contactar con nosotros.